En una entrevista de trabajo no solamente se evalúan las respuestas verbales a las preguntas que te elaboran, también el equipo de atracción de talento está evaluando la comunicación no verbal.
El lenguaje corporal, que no es más que todo lo que trasmites por medio de movimientos o gestos, delata completamente tu percepción acerca de la persona con la que estás interactuando.
Cuando conversas con una o varias personas, reflejas y envías miles de señales y mensajes a través de tu comportamiento. Si manejas adecuadamente el lenguaje corporal, encontrarás ventajas muy importantes, como:
- Aumentar tu influencia.
- Mejorar tus habilidades interpersonales, lo que le evitará malos entendidos. c) Reducir momentos de conflicto y negatividad.
- Desarrollar herramientas efectivas de persuasión.
- Ser más asertivo.
El lenguaje del cuerpo
En términos generales en una entrevista de trabajo se evalúa lo siguiente de la comunicación no verbal:
Una buena presencia:
Un cuerpo relajado y flexible en sus articulaciones, para lograrlo deberá practicar la meditación y hacer ejercicios. Sin ello no podrá proyectarse adecuadamente.
Postura correcta
Una buena postura le ayuda a balancear el cuerpo, evita poner más presión en algunos huesos y músculos y por supuesto a lucir más alto y delgado.
La postura de acuerdo a muchos expertos está ligada a la autoestima. Las personas con una imagen saludable de sí mismos (y algunos arrogantes) tienden a tener una mejor postura. Muchas veces por varias razones nos acostumbramos a pararnos encorvados. Los trabajos en los cuales estamos sentados todo el día o trabajos en los cuales hay que agacharse frecuentemente causan mala postura.
La forma de caminar
Concéntrese en caminar con las puntas de los pies paralelas y hacia el frente no hacia a los lados. El tamaño de sus pasos tiene que ser proporcional al tamaño de su cuerpo. No de pasos más grandes de lo que pueda. No olvide dar continuidad al paso. Cuando camine mantenga su vista en una línea paralela al piso, no camine viendo hacia el piso o a un horizonte lejano. La clave es la práctica, hágalo frente a un espejo.
La forma de sentarse
Coloque la cadera en el ángulo del respaldo y el asiento de la silla. No deberá estar demasiado rígido. Tenga un margen entre la postura rígida y la desgarbada. Recuerde que inclinarse hacia adelante refleja atención y hacia atrás, aburrimiento.
La forma de saludar
El saludo, en cualquiera de sus modalidades (estrechar la mano, dar un beso, dar un abrazo, etc.) es una forma de mostrar cortesía y buena educación al resto de personas con las que tratamos.
Cuando conocemos a otras personas, hay que mostrar de forma verbal y física, nuestras buenas intenciones, nuestra disposición a tener una conversación, un trato personal (por motivos laborales, sociales…) en definitiva a expresar un acercamiento de forma educada, correcta y respetuosa.
Por ello el saludo, y la forma de hacerlo es de vital importancia. Tener un saludo demasiado afectuoso con una persona a la que no conocemos puede causar un cierto “rechazo” o aversión por parte de la persona saludada. Es por ello necesario conocer como saludar, cuando y de que manera, para evitar, como ocurre con los regalos, que la finalidad del mismo se vuelva en nuestra contra o al menos no surta el efecto deseado. El saludo tiene que ser una bienvenida, una puerta abierta.
Los saludos son la manera con la que las personas expresan, de forma verbal y física, su disposición a entablar una “cierta relación” con el interlocutor. Es un gesto de cortesía y de buena educación, así como un signo de “no enemistad”, en un principio.
Contacto visual con el entrevistador
Mirarse a los ojos es un elemento básico de las relaciones humanas. Cuando no lo hacemos en el momento oportuno, mostramos desinterés por la otra persona. Parecemos demasiado distraídos para que nos importe o quizás avergonzados de algo. La falta de contacto visual impide la conexión.
Al escuchar, miras atentamente a los ojos de tu interlocutor para demostrarle interés y atención, mientras que la otra persona suele desviar a menudo la mirada cuando te habla. Si nos miran fijamente al hablarnos es fácil que nos pongamos nerviosos, sobre todo porque aparece el dilema de sostener durante demasiado tiempo una mirada, frente a desviar los ojos, algo que puede ser interpretado como falta de interés.
Después, cuando te dispones a tomar la palabra, desvías la mirada un instante, justo antes de empezar a hablar, para hacer ver que te dispones a dar una respuesta considerada y meditada. Por supuesto, la persona con la que hablas no es consciente de todo esto, pero a un nivel sutil está captando todos estos mensajes y probablemente tiene ya una impresión bastante favorable ti.
Ademanes y gestos
Un ademán es un movimiento o actitud con que se manifiesta un estado de ánimo. Si no hay desaniman y si hay en exceso descontrolan. Se dice que son palabras hechas movimiento, utilizadas para apoyar la comunicación oral de manera natural, por lo tanto deben corresponder en magnitud y acción.
Cuando estamos nerviosos por la entrevista de trabajo es muy probable que toquemos precisamente esa parte de nuestro cuerpo que menos nos gusta. La ansiedad es un sentimiento muy intenso que nos hace más conscientes de nosotros mismos y, por tanto, también de aquello que no nos gusta en nosotros. Sin embargo, también puede tener otros significados. Tocarse la boca, por ejemplo, puede indicar que no nos gusta o bien un temor a decir algo que no debemos. La persona que se frota las manos nerviosamente parece estar diciendo “tengo miedo de lo que podría llegar a hacer con mis manos”. Los niños se tapan descaradamente las orejas cuando no quieren oír; los adultos, más discretos, se las tocan.
22 Reglas para el Éxito del Lenguaje No Verbal
1. El primer encuentro es muy importante. Una mala impresión inicial no puede arreglarse con facilidad; es mucho más fácil hacerlo bien desde el principio. No se preocupe demasiado por lo que dice en un encuentro formal. Para dar una buena impresión es más efectivo ser un buen oyente que un buen orador.
2. Sea consciente de la impresión que su aspecto puede provocar en los demás, tanto en sentido positivo como negativo. Si su aspecto genera un sentimiento negativo en los demás, trabaje para cambiarlo. Tenga también en cuenta los sentimientos positivos que su aspecto puede generar en los demás y úselos.
3. No sostenga la mirada durante más de cinco segundos al estar con una persona. Observe cuando esté a unos 5 ó 6 metros y luego interrumpa brevemente el contacto visual bajando la mirada, a menos que pretendas transmitir falta de interés por la otra persona o desee confundirla y desconcertarla interrumpiendo el contacto visual mirando hacia arriba.
4. Sea el primero en utilizar el flash de la ceja. Unos microsegundos antes de iniciar el contacto visual, sus cejas y las de la otra persona se levantan y caen en un movimiento que suele durar una quinta parte de segundo. Es lo que se llama el flash de la ceja y sirve para atraer la atención de la otra persona a los ojos y la cara. Se usa entre personas con una relación amistosa, pero no entre personas que no se conocen o no mantienen una buena relación. Conteste siempre al flash de la ceja con otro flash, cuando lo inicie otra persona. Utilícelo cuando esté a unos 2 ó 3 metros de la persona con quien va a encontrarse.
5. Utilice la sonrisa más apropiada para cada ocasión. Sonreír de un modo no adecuado puede crear tan mala impresión como no sonreír en absoluto.
6. Procure no invadir nunca el espacio personal de la otra persona de manera no intencionada. No se acerque a más de 45 centímetros, a no ser que tenga una relación de amistad íntima o de pareja con esa persona.
7. Tenga en cuenta que la distancia a la que una persona desea que se sitúe puede variar según cada persona y cultura. Procure situarse a la distancia correcta.
8. En algunos casos, entrar en el espacio personal de alguien puede ayudar a aumentar el agrado mutuo, pero sólo debe hacerse si se está elogiando a la otra persona, se le está dando la enhorabuena, etc. Esto sólo ha de hacerse cuando ya se ha logrado cierta compenetración con la otra persona. ¡No lo olvide!
9. Con desconocidos, nunca permanezca de pie frente a un hombre ni al lado de una mujer extraña. Si se trata de un hombre, empiece en una posición semilateral y vaya desplazándose hacia una posición frontal poco a poco. Si se trata de una mujer, haga al contrario, comience en una posición frontal y vaya desplazándose hacia una posición semilateral.
10. Nunca permanezca de pie cuando los demás están sentados, a no ser que pretenda dominarlos o intimidarlos.
11. Evite los sillones hundidos que le obligan a echarse hacia atrás, pues limitarán su capacidad para usar el lenguaje no verbal relacionado con la postura.
12. Durante el apretón de manos mire a los ojos de la otra persona, modere la presión que aplica y mantenga el contacto durante unos 5 segundos. Si desea transmitir dominio utilice un apretón más fuerte y prolongado de lo normal. Si desea transmitir sensación de amistad, aplica una presión moderada pero prolongando ligeramente el contacto y mientras le de la mano sonría, mantenga una expresión facial relajada e inclínese ligeramente hacia delante.
13. Evite usar gafas con cristales oscuros o con reflejos. Si desea que le consideren una persona afable y simpática, use lentes de contacto en lugar de gafas.
14. Para aumentar la calidez y conseguir la cooperación de la otra persona, utilice una ligera inclinación de cabeza hacia un lado, junto con una sonrisa. De este modo, la disposición para cooperar con usted aumentará mucho.
15. Cuando hable a un grupo procure que su mirada los incluya a todos. No lea lo que tienes que decir, memorícelo o utilice breves notas como recordatorios.
16. Camine tranquilamente, con firmeza y erguido, como si fuera el propietario del lugar por el que camina. No vaya deprisa ni furtivamente, tómese su tiempo para observar el entorno.
17. Si quiere dominar a otra persona controle su tiempo y su espacio. Utilice una mirada prolongada para desconcertar a la otra persona. Pero nunca devuelva un contacto visual prolongado; en lugar de eso, interrumpa el contacto visual mirando hacia derecha o izquierda (nunca hacia abajo). Si alguien le hace esperar, no espere más de 15 minutos, a menos que haya una razón válida para el retraso.
18. Mantenga la mente abierta al acudir al encuentro de una persona. No se forme demasiadas ideas preconcebidas sobre lo que va a ver.
19. No preste atención a los rostros. Las señales del lenguaje no verbal del rostro son las más fáciles de falsear.
20. Para detectar la ansiedad mire los pies o las manos de la otra persona. Verá que hace pequeños movimientos nerviosos con ellos. Con los pies dará pequeñas patadas al suelo, se frotará un pie con otro, restregará las puntas contra el suelo, etc. Con las manso juguetea nerviosamente con el bolígrafo u otro pequeño objeto, se toca el cabello, se frota las manos, se toca una oreja, se alisa la ropa, se muerde las uñas, etc. Todos estos son signos de nerviosismo y tensión interior.
21. Si está intentando vender algo o cerrar un trato, existen ciertas señales que indican la buena disposición de la otra persona, como liberación repentina de la tensión, aumento del contacto visual, mayor proximidad y acariciarse el mentón.
21. Para saber si una amistad es sincera observe los pliegues que se forman en las mejillas al sonreír, que revelan una sonrisa afectuosa, aumento del contacto físico, imitación inconsciente de su postura y gestos y una inclinación lateral de la cabeza durante la conversación.
22. Para detectar la mentira y el engaño observe si la otra persona gesticula menos de lo normal y se toca cada vez más. Por ejemplo, al mentir se tocan la nariz, las orejas, los ojos, el cuello, se frotan las manos. Sobre todo, tocarse la nariz y los ojos puede ser un indicativo de mentira. Los engaños que van acompañados de hostilidad conllevan movimientos agresivos de pies, manos o boca (morderse los labios pellizcarse las mejillas, rascarse con agresividad, etc.).